lunes, septiembre 10, 2018

Recaída

Los domingos por las noches son fatales, aún más en soledad. Porque todavía no he construido pilares fuertes para sostenerme.
Pido no caer en tentación, pero me dejo llevar para saber si puedo soportarlo. Es inútil.
Ese domingo fue de despedida.
Se acababa algo para siempre.
Vi lentamente como se destruyó lo que había construido con todo mi ser... Todavía no me encuentro, no sé quién soy. Pero estoy en eso.