Hermana mia, corazón de oro
Rosas rojas, espinas negras
la distancia no es más
que el camino al inframundo
dos verdaderas monotonias
que quieren unirse en un solo
destino, almas separadas
unidas por el amor, de la sangre
El mar me habla y me dice cosas
que aun no comprendo...
que debo amar, a ese ser
sin piedad, me liberará los pecados
y moriré en paz, amaneceré en el
paraiso, y a ella agradeceré
La noche me habla, sobre el
camino que debo seguir.
Yo sueño despierto sin conciliar
el sueño, me quiere advertir.
A ella la veo crecer,
como el mar que se enfurece
y no quiere volver
Eres la paz, eres la armonía
y juntos formamos una melodía
que florece los jadines del eden
sangre divina de mi ser,
jamás te quiero perder
de tu alma energe la simplicidad
lo sublime, lo elevas
con una fuente de perpetua
ingenuidad.
Contigo quiero encontrar la
eternidad, quiero estar al lado
tuyo, junto a Dios.
Ser niños y jugar, hasta cansar
y nunca despertar del sueño
que juntos hemos de acabar.
No sé que pones en mi cuarto
para que tu aroma llegue desde
tan lejos, ¿será mi mente?
¿Será mi cuerpo? A lo mejor
es tu alma, viajando en orbita
explorando una vez más mis
verdaderos sentidos.
No te vallas te lo pido,
quedate hasta que vuelva
mi sueño a encontrar.
para volverte a ver..
y volver a jugar.
Dedicado a mi hermana de 15 años
quien vive en méxico.
Te extraño.
