Mientras estoy acostado en mi cama,
mirando unas cuantras letras
talladas en la pared, mi alma se pregunta
¿Donde estás?, mientras mi cuerpo señala
una potente aurora dentro de lo imaginario
que se para en frente de mi puerta plegable.
Cuando llegastes con los ojos casi aguados
cuando entraste y sentiste cuanto te quería
cuando hablaste y dijiste las cosas
aquellas que aun las recuerdo y no las olvido
porque el sonido de tu voz lo tengo en mi oido.
Suele caerse el agua cuando volteamos un vaso
lleno de ella, pero, ¿se caerá un corazón
lleno de amor si lo volteamos? O se caerán los
petalos de una rosa que volteamos al amanecer
porque no la alimentamos como debe ser?
¡No lo sé! ¿porque no me lo dices?
Porque no me dejas entrar más,
traspasar ese aura blanca que te rodea
para que esas palabras tuyas en mi pared
puedan expresar más de lo que dicen.
Y asi preguntarme, al fín, como tu, como yo
Aqui solo, en la oscuridad de mi habitación.
¿Necesitaré de alguien para realmente ser feliz?
Encontre la respuesta tirada en un vaso con agua
pero, necesito encontrarla en un corazón lleno
de amor.. y en los petalos de una rosa roja en el jardín.
¿me ayudas? o
¿necesitaré de alguien?
...
